Plantar pimientos, 16 recomendaciones para incorporar técnicas sostenibles y rentables.

Una de las tareas agrícolas más satisfactorias es la de plantar pimientos. Si somos agricultores profesionales o hemos decidido crear un huerto casero o urbano, plantar pimientos representa un proyecto muy versátil y beneficioso a nivel económico y nutricional, pues nos reportará una atractiva rentabilidad por su alta demanda en mercados locales e internacionales, y además obtendremos una fuente rica en vitaminas A y C, antioxidantes y minerales esenciales, como veremos más adelante.

Así mismo, si al plantar pimientos nos animamos a adoptar prácticas innovadoras y ecológicas como el acolchado agrícola biodegradable de papel, estaremos contribuyendo considerablemente a la protección de nuestro medio ambiente y a la agricultura sostenible, reduciendo el impacto ambiental en lo que respecta al uso de herbicidas y al consumo excesivo de agua, nuestro líquido más preciado.

¿ Por qué plantar pimientos ?

Plantar pimientos representa tradición, rentabilidad y sostenibilidad ambiental, además, esta es una decisión inteligente que combina versatilidad culinaria y beneficios nutricionales, y resulta una opción muy valiosa tanto para grandes productores como para pequeños agricultores, por la gran diversidad de variedades que se adaptan fácilmente a diferentes climas y suelos.

En esta guía haremos una ruta paso a paso de todo el proceso que necesitamos conocer e implementar para plantar pimientos con éxito. Aprenderemos a optimizar cada fase de nuestro cultivo a partir de la selección de las variedades más apropiadas, pasando por la preparación adecuada del terreno, el uso del acolchado de papel biodegradable que nos facilita todo el proceso de siembra y cuidados tanto del suelo como de nuestros pimientos, las prácticas necesarias de riego y fertilización para maximizar la productividad de nuestra siembra, y finalmente, conoceremos los tiempos apropiados para la cosecha.

https://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S0187-57792022000100129&script=sci_arttext&utm_source=chatgpt.com

LINK: Comportamiento agronómico en la siembra de pimientos (Capsicum annuum L.). Este estudio evalúa el rendimiento de las siembras de pimientos en diversos ambientes de cultivo.

Preparando el terreno adecuado para plantar pimientos.

Esta primera fase es quizás la más importante de todo el proceso, pues si creamos las condiciones ideales del sustrato con el soporte del acolchado de papel biodegradable, obtendremos una cosecha exitosa tanto para el óptimo desarrollo de nuestros cultivos como para la sostenibilidad del medio ambiente.

Si nuestro suelo es propenso a encharcar, una buena solución es hacer zanjas de drenaje para minimizar el impacto del nivel de agua desmedido o acumulable. Igualmente, debemos analizar la composición del suelo para ajustar las posibles deficiencias y adecuar los sustratos que necesitamos para plantar pimientos sin imprevistos y con éxito hasta su fase final.

Plantar pimientos requiere de una labranza apropiada.

En esta fase preliminar y en primer lugar, debemos asegurarnos de eliminar residuos de cultivos anteriores que podrían albergar plagas o enfermedades activas o latentes. Según la extensión del suelo del que disponemos, debemos removerlo con la ayuda de herramientas manuales o mecánicas, bien sea arados, palas ahuecadoras ( para penetrar y romper compactaciones sin voltear el suelo ), barra de descompactación manual ( en áreas susceptibles a encharcamientos ), motocultores o motoazadas ( en el caso de grandes dimensiones ), o azadones, rastrillos y palas ( para huertos medianos y pequeños ).

También podemos hacer uso de la labranza de conservación, que consiste en minimizar el impacto al suelo, sin labranza, sólo abriendo pequeños hoyos, y plantando directamente en el suelo agregando residuos vegetales, y así intervenimos lo menos posible en la composición activa del suelo.

Composición ideal del suelo para plantar pimientos.

Ahora bien, en general, será ideal contar con un suelo de buen drenaje, no susceptible de encharcamientos, y debemos prepararlo con un alto contenido en materia orgánica que mejore su estructura y aporte nutrientes esenciales como nitrógeno, fósforo y potasio. Para lograr esto podemos añadir compost o estiércol bien descompuesto, seco y suelto.

El pH adecuado será entre 6.0 y 6.8, pues en este rango los nutrientes serán más accesibles a la absorción que requieren nuestras plantas. En caso de que el pH sea demasiado ácido o alcalino, debemos corregirlo con cal agrícola (para aumentar el nivel de pH), o azufre (si necesitamos reducirlo).

https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/8551305.pdf

LINK: Deficiencia Nutricional de Macronutrientes en Plantas de Pimiento. Este artículo analiza el impacto de la ausencia de nitrógeno, fósforo y potasio en el desarrollo del pimiento en sistemas hidropónicos.

El acolchado agrícola de papel biodegradable nos tiende una buena mano para plantar pimientos.

Esta es una solución innovadora que nos auxilia para preparar y optimizar el suelo, cualquiera que sea su composición. He aquí algunos beneficios del uso acolchado biodegradable:

• Control de las malas hierbas: El acolchado de papel nos es de gran utilidad pues impide el crecimiento y proliferación de hierbas que van a competir con nuestros pimientos, y así evitaremos hacer uso de herbicidas químicos, que no son nada saludables ni para nuestros cultivos ni para nuestro consumo.

• El acolchado de papel conserva la humedad para plantar pimientos con óptimos resultados: Por su composición, el acolchado logra reducir la evaporación del agua y esto nos permite una irrigación menos frecuente, eficiente y más responsable, en especial para los climas secos y con limitaciones hídricas.

• Estabilidad térmica del cultivo: Haciendo uso del acolchado de papel, obtenemos un total control sobre los cambios de temperatura en cualquier estación del año, lo que implica que las raíces de las plantas tendrán un hábitat protegido y cómodo y así nuestros pimientos se van a desarrollar más uniformes y robustos.

• Sostenibilidad y respeto al medio ambiente: El material del acolchado de papel es biodegradable, se descompone naturalmente, se convierte en materia orgánica rica en nutrientes para sucesivas plantaciones, y lo más importante es que eliminamos definitivamente la generación de residuos plásticos.

• Instalando el acolchado de papel para plantar pimientos: Extendemos el material sobre las filas donde vamos a plantar pimientos, hacemos pequeños agujeros para colocar las semillas o las plántulas, y nos aseguramos de que nuestro papel quede bien fijo en los bordes para evitar que se levante con el viento y pueda entrar algún insecto o contaminante.

Para entender lo que está detrás de la tecnología de acolchado agrícola de papel Novamulch recomendamos leer el siguiente enlace:

La Tecnología Novamulch

Siembra y Trasplante recomendados para plantar pimientos.

Siembra en semilleros protegidos: Estas estructuras están diseñadas para la fase de germinación de las semillas y el primer desarrollo de las plántulas. Aquí se logra un hábitat controlado, especialmente para atender cuidados específicos tales como evitar la exposición a agentes extraños y perjudiciales, y permitir más fácilmente el crecimiento robusto, rápido y uniforme inicial, previo al trasplante definitivo al suelo en el que van a cumplir el resto de su proceso.

Fechas recomendadas: Febrero a Marzo.

Temperaturas: Debemos mantener temperaturas que oscilen entre 20/25°C y ubiquemos espacios que reciban buena luz solar.

https://www.juntadeandalucia.es/export/drupaljda/1337160265Cultivo_Pimiento_Invernadero.pdf

LINK: Manual de Producción de Pimientos en Invernadero. Este manual ofrece un modelo de producción de pimiento morrón en invernadero, dirigido a productores y técnicos interesados en sistemas alternativos de producción.

Trasplantando los pimientos al suelo definitivo.

El tiempo preciso para el trasplante del semillero protegido al suelo definitivo, será cuando las plántulas tengan entre 15 y 20 cm de altura, y en este momento pueden presentar de 4 a 6 hojas. Entre cada planta debe haber aproximadamente de 30 a 50 cm de distancia, y entre una fila y otra entre 70 y 100 cm. Mucho mejor y más beneficioso será trasplantar en días nublados, o durante la tarde, y así evitaremos que nuestras plántulas se vean afectadas por el estrés del calor.

Mantenimiento de las plántulas de pimientos una vez trasplantadas al suelo definitivo.

• Esta fase será clave, pues en este momento es cuando vamos a garantizar que cada planta se fije y adapte correctamente al terreno, comience a desarrollar un sistema radicular sólido, y logre producir frutos de óptima calidad.
• Inmediatamente después del trasplante vamos a regar 2 o 3 veces por semana, para afianzar el contacto de las raíces con el terreno, e iremos disminuyendo la frecuencia del riego a medida que las plántulas se vayan afianzando al suelo.
• El riego por goteo es ideal al plantar pimientos pues va directo a las raíces y evitará que el follaje quede húmedo permanentemente. Aquí estaríamos evitando algunas enfermedades.
• Durante las primeras semanas vamos a mantener el suelo húmedo mas no encharcado. Siempre recordemos que el exceso de agua producirá putrefacción radicular o estrés hídrico, al igual que una exposición al sol inadecuada (en este caso debemos utilizar mallas de sombreo), o bajas temperaturas (aquí cubrimos con túneles de plástico reciclable o mantas térmicas para evitar daños en el follaje por las heladas).
• En esta primera fase, vamos a aplicar un fertilizante equilibrado, soluble en agua y rico en Fósforo (P) con el fin de estimular el desarrollo de las raíces.
• También debe tener Nitrógeno (N), pues favorece el crecimiento inicial de las hojas, pero no debemos excedernos con este último porque puede producir un crecimiento excesivo del follaje en relación con el sistema radicular.
• Hacia la tercera o cuarta semana posterior al trasplante, es recomendable añadir Potasio (K), que es esencial para el desarrollo de los frutos.
• En caso de que el suelo no haya recibido materia orgánica inicial (compost o estiércol), y en este momento lo necesite, aplicaremos alrededor de las plántulas una fina capa que servirá de abono de liberación lenta, pero este material debe estar bien descompuesto y suelto.

Controles que debemos tomar en cuenta al plantar pimientos.

Malas hierbas: Si usamos el acolchado de papel biodegradable no tendremos este inconveniente, pues el material del acolchado no sólo reduce su proliferación, sino que mantiene estable la temperatura y la humedad del suelo protegiendo las raíces; así evitaremos gastos innecesarios con aditamentos que pueden resultar no sustentables y por lo tanto, no compatibles con el medio ambiente.

Aparición de plagas como Pulgones, Mosca Blanca, Gusanos Cortadores:

Los Pulgones: Debilitan el crecimiento de las plantas jóvenes pues se alimentan de su sabia. Podemos controlar esta plaga usando jabón potásico o introduciendo las mariquitas, que son depredadores naturales e inofensivos para las plantas.

La Mosca Blanca: Es un insecto pequeño muy común y dañino, que se alimenta de la savia de las plantas, especialmente de los pimientos, perforando sus hojas tornándolas amarillentas y produciendo su caída prematura, reduciendo la capacidad natural de la planta para producir la fotosíntesis, y reduciendo la producción de los frutos.

• Podemos combatirla utilizando trampas cromáticas amarillas pegajosas (para capturar moscas blancas adultas), eliminando y controlando la proliferación de las malas hierbas, rotando el cultivo, es decir, no plantar pimientos en el mismo suelo repetidamente para así poder romper el ciclo de esta plaga, evitar (como ya dijimos), el excesivo uso de Nitrógeno pues al favorecer el crecimiento de hojas tiernas, favorecerá el asentamiento de la mosca blanca en nuestro cultivo.

Gusanos Cortadores: Son larvas pertenecientes a la familia de las polillas, muy comunes también en los cultivos hortícolas, incluyendo los pimientos, y durante la fase inicial de crecimiento son más agresivas. Cortan la base de los tallos jóvenes y por lo tanto caerán las plántulas, y algunas de estas larvas atacan las raíces, debilitando las plántulas, impidiendo su crecimiento adecuado y produciendo menos frutos y deficientes en calidad.

• Para evitar esta plaga de larvas, debemos limpiar y despejar nuestro terreno de cultivos anteriores, para eliminar los refugios de los gusanos.
• Igualmente vamos a retirar y controlar la proliferación de malas hierbas ( el uso del acolchado de papel biodegradable aquí se hace imprescindible ), y vamos a rotar nuestros cultivos para detener el ciclo de vida de estos depredadores.
• Una excelente forma de evitar estos daños consiste en trasplantar nuestros pimientos ya desarrollados, no tan jóvenes, pues las plántulas más maduras no son susceptibles al acoso de las larvas.
• Colocando collares de cartón o plástico alrededor de las plantas jóvenes, es una estrategia complementaria para evitar que los gusanos alcancen los tallos.

Uso de los tutores para plantar pimientos.

Durante el crecimiento, recomendamos instalar cañas o estacas que ayuden a mantener los tallos firmes con respecto al peso de los frutos, atando suavemente y sin presionar cada tallo con materiales flexibles como la rafia. Debemos asegurar que cada tallo se mantenga sólido mas no asfixiado por la atadura.

Monitoreo continuo durante el crecimiento de los pimientos.

• En las fase inicial, hagamos una poda ligera para eliminar las hojas y brotes inferiores, los que estén en contacto directo con el suelo. Esta operación va a reducir el riesgo de contraer infecciones fúngicas.
• Por otro lado, vamos a hacer una revisión periódica de nuestras plantas, identificando cualquier anomalía como por ejemplo deficiencias de nutrientes, que se ve reflejado en hojas amarillas y deformes.
• Otro signo anómalo es el estrés; lo detectamos cuando el follaje se ve marchito y falto de vigor.

Todos estos pasos descritos sobre el mantenimiento y control que debemos implementar para plantar pimientos, sobre todo en su fase inicial, sentarán las bases para obtener resultados esperados, exitosos y rentables.

Al mismo tiempo, si supervisamos permanentemente nuestro cultivo y adoptamos técnicas sostenibles como el acolchado de papel biodegradable, marcaremos una considerable diferencia en la productividad y rendimiento de nuestra actividad agrícola.

Plantar Pimientos. Fase Final Parte 1.

Tiempo de cosecha.

• Este es un momento crucial en el que vamos a manejar adecuadamente la calidad de nuestros pimientos, su frescura, su sabor, su valor nutricional, su vida útil. En general, el tiempo estimado para la cosecha varía entre 60 y 90 días posteriores al trasplante.
• Y durante la temporada de producción, los pimientos pueden cosecharse en intervalos regulares, cada 7 a 10 días, pues las plantas generan frutos en forma escalonada.

Debemos tomar en cuenta varios factores como la variedad que hemos plantado y el propósito que hemos decidido para el tipo de consumo (en fresco, para procesar, etc.), así como el clima en el que cultivamos los pimientos y las condiciones del suelo que hemos trabajado para desarrollar nuestra siembra.

Pimientos Verdes y Pimientos Maduros.

• Cosecharemos los Pimientos Verdes cuando alcancen su tamaño completo y presenten un color verde brillante, y al tacto observemos que su textura es firme. Este es el momento en el que no han madurado por completo, pero tienen un sabor más fresco y menos dulce.
• En cambio, si deseamos cosechar los Pimientos Maduros, debemos mantenerlos en las plantas hasta que tomen su color final (rojo, amarillo, naranja).
  En este punto serán más dulces, tendrán mayor contenido de vitaminas y antioxidantes, como veremos más adelante.

La Cosecha Manual.

• Para no malograr la piel de los pimientos y las plantas, debemos manipular la cosecha con mucho cuidado y esmero, pues si manipulamos bruscamente la extracción del fruto haremos que sea más susceptible a infecciones y por lo tanto su vida útil será mucho más corta.
• Para cortar el fruto, recomendamos utilizar tijeras de podar o cuchillos afilados, y dejamos
  un pequeño pedúnculo adherido que permita la reproducción.

Plantar Pimientos. Fase Final Parte 2.

Conservación de los Pimientos.

• Conservación en Fresco: Los pimientos frescos se almacenarán más adecuadamente y con seguridad, a temperaturas entre 7°C y 10°C y con una humedad relativa del 85%-90%.
• Si logramos condiciones óptimas, podremos mantenerlos frescos entre 2 y 3 semanas.
• No recomendamos temperaturas frías en extremo. Por ejemplo, si los conservamos en áreas por debajo de 7°C, aparecerán manchas en los frutos y su textura será blanda.
• La ventilación del espacio de almacenamiento es esencial, pues debemos reducir y controlar permanentemente la acumulación de humedad para prevenir potenciales enfermedades y otros deterioros.

• Conservación a largo plazo: Si los vamos a congelar, previamente debemos lavarlos, secarlos muy bien y cortarlos según nuestros requerimientos. De esta manera, conservaremos hasta 6 meses su sabor y valor nutricional.
• Los pimientos choriceros o ñoras, entre otras variedades, pueden secarse al aire libre o en hornos a baja temperatura, en caso de que vayamos a usarlos en salsas y especias.
• Una conservación prolongada hasta 12 meses (conservas), va a requerir asar los pimientos o colocarlos en vinagre, envasarlos en frascos debidamente esterilizados, almacenarlos en espacios libres de humedad y parcialmente iluminados.
• Si deseamos mantener la frescura de los pimientos dentro del frigorífico, tenemos la opción de almacenarlos en bolsas al vacío bien selladas (así reducimos la exposición al oxígeno), y etiquetadas para identificarlas fácilmente.
• En todos estos casos, vamos a tomar precauciones tales como escoger los pimientos sanos, sin daños y en buen estado, para que no se deterioren con facilidad y tengan una vida útil más prolongada.
• Otra medida importante es mantener la humedad adecuada para evitar la aparición de hongos (humedad alta), o la deshidratación de los pimientos
• (Humedad baja), y es fundamental contar con un espacio de almacenamiento limpio y libre de plagas (ácaros, moscas, etc)

Usos culinarios versátiles: Cómo los pimientos añaden sabor, color y textura a la gastronomía.

Los pimientos son un ingrediente esencial para la cocina local e internacional. En la gastronomía española, son indispensables en platos como el pisto, los sofritos, las ensaladas, salsas y conservas.

Muy apreciado y ancestral es el pimiento Morrón, originario de la civilización precolombina (Mayas y Aztecas), llegando a Europa en el Siglo XVI desde Méjico, Perú y Bolivia. Favorecidas con el clima cálido y mediterráneo, estas semillas proliferaron y se arraigaron en estas tierras; en Andalucía ( Almería, Granada ), Murcia, Extremadura y Castilla-La Mancha, y ya forma parte indispensable de la cocina tradicional, de gran tamaño y color rojo intenso, carnoso y de sabor dulce. Se utiliza en asados, ensaladas y como base en numerosos guisos.

Los pimientos del Piquillo, cultivados en Lodosa (Navarra), son pequeños, de forma triangular, color rojo y esenciales en los rellenos de bacalao y carnes rojas. Antes de su consumo se recomienda asarlos y pelarlos para resaltar su sabor.

Los pimientos de Guernika. Igualmente procedentes de América, y en el País Vasco tienen forma alargada, verdes y de sabor suave. Se suelen freír y consumir como aperitivo o acompañamiento.

Los pimientos Choriceros, también originarios de América, como muchas variedades de pimientos, y en España no sólo se adaptó al clima templado y ligeramente húmedo de La Rioja y el País Vasco, sino que hoy es un ingrediente fundamental en la gastronomía local, como la salsa y el bacalao a la vizcaína.

En Galicia, las variedades de pimiento son muy conocidas.

Una de las más famosas es el pimiento de Herbón (Padrón), de sabor suave y en ocasiones picante, el pimiento de Arnoia, medianos en tamaño, con sabor dulce y piel fina, el pimiento de O Couto (Ourense), cultivado en al Comarca de Ferrolterra ( Coruña ), se distingue por su sabor dulce y nada picante, el pimiento de Mougán, procedente del municipio de Guntín (Lugo), son pequeños y muy apreciados por su sabor suave y dulce. Todos son muy apreciados en la gastronomía local.

Propiedades nutricionales de los Pimientos.

Plantar pimientos nos proporciona una fuente rica en vitaminas, antioxidantes y minerales esenciales. Estos frutos excepcionales se distinguen por su alto contenido de nutrientes esenciales, algunos de los cuales mostramos a continuación:

Vitamina C: Un pimiento rojo puede contener hasta el 150% de la cantidad diaria recomendada de esta vitamina, y hasta tres veces más vitamina que una naranja, por lo cual, fortalece nuestro sistema inmunológico, favorece la absorción de hierro y mantiene la piel saludable.

Antioxidantes: Los pimientos reúnen compuestos como Betacarotenos (compuestos naturales responsables de los colores vibrantes como el rojo, el naranja y el amarillo, que vemos en muchas frutas y verduras, que al ser ingeridos se convierten en Vitamina A; esto nos ayuda a mantener una buena visión en condiciones de poca luz, evita el desarrollo de la ceguera nocturna y ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.).

Vitaminas del grupo B. B6 y B9: La vitamina B6 favorece el buen funcionamiento de nuestro sistema nervioso y la producción de neurotransmisores, en tanto que el Acido fólico o Vitamina B9, es fundamental durante el embarazo para prevenir defectos en el desarrollo del feto.

• Otro compuesto esencial de los pimientos es la Luteína y la Zeaxantina (especialmente coadyuvantes en la salud ocular y retarda la aparición de la mácula ocular).
• Igualmente, la Capsantina, contenida entre los compuestos de los pimientos rojos, ayuda a prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y presenta propiedades antiinflamatorias.
• Además, contienen alto contenido en fibra, lo cual favorece el proceso de digestión y nos ayuda a mantener el colesterol en niveles estables.

Plantar Pimientos. Una fuente sostenible de ingresos y de alto valor en mercados locales e internacionales.

• Gracias a su versatilidad, alta demanda y valor añadido en los mercados, plantar pimientos representa una opción muy rentable, sostenible y proyectada a largos plazos con éxito, si estudiamos con atención los procesos de cultivo, producción, cosecha y almacenamiento, y el retorno económico que nos reporta es significativo, ya sea para agricultores de grandes extensiones de tierra, como quienes deciden plantar pimientos en medianas o pequeñas porciones de suelo.
• En la dieta mediterránea los pimientos son un ingrediente esencial para las ensaladas, guisos, tapas, conservas, salsas, productos congelados, y tanto el pimiento de Padrón como el Piquillo de Lodosa, ya ocupan un lugar sólido y de calidad superior en los mercados locales.
• Por otra parte, en los mercados internacionales, los pimientos producidos en España son muy apreciados en países como Alemania, Francia y Reino Unido, por lo que es uno de los principales exportadores.
• De esta manera, si elegimos plantar pimientos y logramos desarrollar esta producción adecuadamente para llevarla a feliz puerto, tendremos la ventaja de diversificar nuestros ingresos de tal forma que obtendremos rentabilidad en mercados frescos y a la vez nos beneficiaremos en la industria de los procesados como las conservas y productos congelados para exportar, aprovechando que los pimientos españoles tienen fácil entrada y son muy apreciados en los mercados internacionales.
• En mercados locales e internacionales, los pimientos representan una excelente fuente de ingresos, pues tienen alta demanda, y en España presentan un nivel de exportación bastante considerable.

Razones por las cuales plantar pimientos es altamente rentable.

Una de las ventajas que obtenemos al plantar pimientos, es que su periodo de producción es prolongado. Como tienen la capacidad de producir frutos durante varios meses, esto nos permite hacer varias recolecciones, siempre y cuando mantengamos las condiciones del cultivo en condiciones adecuadas.

Producción continua:

• La naturaleza perenne del pimiento, en climas cálidos o cultivados en invernadero, permite que las plantas sigan floreciendo y generando frutos incluso después de la primera cosecha.
• En muchos casos, un cultivo bien manejado puede ofrecer entre 4 y 6 cosechas en una temporada, dependiendo de la variedad y las técnicas de cultivo empleadas.

Maximización del rendimiento:

• La posibilidad de recolectar múltiples veces significa que lograremos obtener un mayor volumen de producción a partir de la misma inversión inicial en semillas, fertilización y preparación del terreno.
• Esto aumenta significativamente la rentabilidad por hectárea, especialmente en variedades de alto valor como el pimiento rojo o las variedades gourmet como el piquillo o la ñora.

Flexibilidad en el mercado:

• Al ofrecer cosechas escalonadas, aprovecharemos las fluctuaciones en los precios del mercado.
• Por ejemplo, al cosechar en diferentes tiempos, ajustaremos la oferta para vender en períodos de mayor demanda, como durante las fiestas o temporadas específicas en mercados internacionales.

Menor desperdicio:

• La capacidad de cosechar en fases nos permitirá cosechar los frutos en su punto óptimo de madurez, y así reducimos el riesgo de pérdidas por sobre-maduración.
• De esta manera, logramos mejorar la calidad del producto final y contribuimos a una sostenibilidad progresiva y continua.

Adaptabilidad a diversos climas y regiones:

• En regiones con inviernos suaves o donde se utiliza la tecnología de invernadero, la prolongación de la cosecha puede extenderse incluso más allá de la temporada tradicional. Esto da lugar a una producción casi continua en zonas como el sur de España, donde los pimientos son un cultivo líder en exportación durante todo el año.

Plantar pimientos nos ofrece cosechas múltiples y prolongadas en el tiempo:

• Las cosechas prolongadas aumentan la productividad de las plantas, y nos permite la oportunidad de obtener varias cosechas por temporada.
• Al mismo tiempo, esta característica nos ofrece una gran ventaja competitiva si buscamos optimizar nuestro rendimiento en un mercado agrícola cada vez más demandante.
• Es el caso de la ñora y el pimiento del piquillo, que son variedades con alto valor en los mercados gourmet.
• De tal manera que, manejando adecuadamente estos aspectos, marcaremos la diferencia entre un cultivo estándar y uno altamente rentable.

Demanda a nivel internacional:

Países como Alemania, Francia y el Reino Unido son grandes consumidores de pimientos españoles, lo que garantiza una salida constante al mercado.

Plantar pimientos no es sólo una actividad agrícola rutinaria. Es un símbolo de riqueza, prosperidad y colaboración con nuestro medio ambiente.
Siendo un cultivo altamente versátil, representa hoy en día una inversión en salud, economía y sostenibilidad, por su riqueza nutricional y versatilidad culinaria, y por la rentabilidad que nos reporta.

Desde sus fases iniciales hasta la cosecha y almacenamiento, se hacen necesarios nuestros cuidados y la toma de medidas preventivas y sostenibles para llegar a feliz término, tales como el uso del acolchado de papel biodegradable.

¡ Manos a la obra y muchos éxitos !